¡Es tan bonito cuando llegas a la presentación del nombre, te tomas tu tiempo para explicar algo que será la identidad de una marca para el resto de sus días y que has creado tú! ¡es tan bonito cuando cliente no solo te da las gracias de mil formas, sino que ves las lágrimas de emoción en sus ojos!, ¡es tan bonito, que merece la presión que se siente cuando estás creando!
La gente cree que el trabajo de crear un nombre para una marca es fácil, pero no.
No desvelaremos cómo lo hacemos, pero os diremos que no solo hay parte creativa.
En este caso, después de un gran análisis, no solo para buscar inspiración, sino para saber lo que estaba sucediendo a nuestro alrededor, identificar posibles competidores, conocer el entorno, etc., le presentamos el top 3 de nombres y decidió quedarse con Ñam Ñam.
No fue fácil llegar hasta ahí, porque muchas veces nuestros candidatos finalistas no pasan la última criba. Esa fase podríamos decir que en ocasiones en un poquito triste, porque muchas veces, el nombre del que nos hemos enamorado, no pasa la última prueba: La prueba de viabilidad .