Fase 1 del trabajo
Buscar la inspiración
Tuvimos que sentarnos con ellos para conocerlos más y además pedirles que nos rellenaran un Briefing. Necesitábamos conocer el tipo de cliente que iban a tener, la imagen que querían dar, su ubicación, como eran ellos como personas, su competencia, etc.
Una vez tuvimos la inspiración nos pusimos manos a la obra.
Fase 2 del trabajo
Desarrollo de la identidad visual
Mucha gente piensa que desarrollar una identidad visual es crear un logo y ya está. Pues desde luego no es lo que más apropiado, pero siempre dependerá de la imagen que quieras dar de tu negocio.
Si te importa poco tu negocio, en ese caso es mejor que te hagas un «cacalogo» con cualquiera de las apps que te dan la posibilidad de hacer uno gratis.
¡En fin! Después de unas cuantas semanas y varias reuniones para ir dando pinceladas a lo que sería el resultado final, presentamos a nuestro cliente la propuesta de gama de color y el logo.
¡Conseguido! Quedaron encantados.
Era el momento de crear todo el universo gráfico para la marca. material de papelería, vinilos, variaciones del logo para todos los soportes, etc.
Fase 3 del trabajo
Llevar la marca a imprenta
Era el momento de crear todo el universo gráfico para la marca.
Material de papelería como tarjetas, carpetas, blogs de notas, vinilos, etc.
Fase 4 del trabajo
Creación de la página web
¿Por qué dejamos la web para el final?
Porque la web debe plasmar la esencia de la marca y si no creamos primero todo su universo, sería imposible plasmarlo y reflejarlo.
No hay ninguna web igual.
Somos como los grandes diseñadores de moda, pero en versión web. Somos los Coco Chanel del diseño web.
Nos metemos en tu cerebro y plasmamos exactamente lo que quieres.